TAJOS DE LA VIRGEN

Las nueve de la mañana, Hoya de la Mora y siete grados, con una sensación térmica algo más baja debido al viento (me cago en diez, si al final va a tener razón Fran, va a ser fresquito) bueno… frío !!! pero con mi chaqueta nueva de 220 euros me río.

Virgen de las Nieves.

Tras una subida en la que algunos tardamos en coger aliento, en dos horas llegamos al Veleta 3.395 m,. antes, el que escribe, se asomo al corral de este y se sorprendió de la cantidad de nieve acumulada todavía.

Corral del Veleta.

En esta incursión por la Sierra de los Tres Miles, nos acompaño por primera vez nuestro compañero Félix, cuado llego junto a nosotros al primer objetivo del día le felicitamos por su primer Tres Mil, allí le indicamos que lo que tenia a su alrededor y como le contamos nuestras rutas invernales por estos lugares, quedándose maravillado (y eso que no la ha visto como nosotros, cargada de nieve)

Félix y cima del Veleta

Allá ell Mulhacen, ¿Proximo objetivo?

Tras una paradita en el Refugio de la Carihuela y reponer un poco las fuerzas nos disponíamos a enfrentamos a lo desconocido y es que a pesar de llevar unos cuantos añitos pateando por aquí y aunque en la Integral habíamos pasado (faldeando por abajo) todavía no conocíamos las cumbres denominada Tajos de la Virgen.


Partiendo desde el mismo refugio se ve un claro sendero, que, sin descender te dirige al cresteo, pasándote a la vertiente Sur, por donde desciendes un poco para seguidamente coger cota, decir que esta perfectamente marcada por hitos de piedra y mas que teníamos que seguirlas, Fran en esta ocasión se maldecía por no haberse traído sus Malamutes ya que el sendero era muy cómodo, pero pronto nos toparíamos con la fama de estos Tajos.

Al poco de ir caminando nos encontramos con un compañero montañero el cual nos indica que tenemos dos alternativas antes de llegar al “Fraile”, una por la vertiente Sur, la que traíamos, mas fácil de andar y otra a la derecha, vertiente Norte con un poco de destrepe, por lo que le dimos las gracias y nos dirigimos a la derecha, desapareciendo el fácil senderito para seguidamente hacer uso de las manos y conseguir ir pasando los bloques de piedra no sin éntrate la risa tonta cundo mirabas para abajo, Fran, y yo nos preguntábamos como tenia que ser esto con nieve y con el mochilon a cuestas, estaba claro que por aquí, ni de coña.

Tras un corto destrepe, llegamos a una zona llana done ya podíamos divisar la figura del Famoso Fraile de los Tajos, desde allí cogimos la vertiente sur y ya no la dejaríamos hasta llegar prácticamente al Refugio del Elorrieta.

Detras nuestra la figura del "Fraile "

Fran, arriba de la pala de nieve.

13:45 horas refugio del Elorrieta, muy grande pero muy hecho polvo, con gran sucedía y paredes derruidas, aunque había habitaciones donde se podía tirar el saco y salvarte de una mala noche afuera, con que poco se podría rehabilitar este gran refugio, no lo entendíamos, pero bueno era ya la hora de sentarse y con el bocata y la cerveza en mano nos disponíamos de disfrutar de como las nubes querían comerse tambien el valle del Lanjaron.

Félix señala la Laguna del Lanjaron.

Detalle del Refugio Elorrieta.

Siesta de Miguel Ángel.

Finalizado el ligero almuerzo y viendo que aun disponíamos de bastante horas de luz Miguel Ángel propuso de dirigirnos al Pico del Caballo, pero las nubes que estaban frenadas allá en el Lanjaron subían rápidamente y la prudencia nos hizo tirar sendero abajo buscando Los Lagunillos de la Virgen, sendero perfectamente marcado y que en dos ocasiones tuvimos que salirnos de el, debido a lenguas de nieve que descendían y cortaban tu paso.

Tras un cómodo descenso llegamos a los Lagunillos, una maravilla ver todavía ese contraste de colores de piedra, hierba y el blanco de la nieve, tras recrearnos en ese paraje pasamos seguidamente por el Embalse de Las Yeguas y viendo que nos sobraba mucho tiempo Miguel Ángel y Fran nos propusieron de andar un poco por las pistas pasando por el Observatorio y el Antenon para desde borreguiles dirigirnos al final de la ruta del día, en este trayecto pudimos observar como estaban trabajando en la construcción de otro embalse, me imagino que para abastecer las necesidades de la estación.

Bueno, eran las 18:00 horas y nos encontrábamos de nuevo Miguel Ángel, Fran, Félix y el que escribe en la Hoya de la Mora, había trascurrido nueve horitas desde que habíamos salido, durante todo el recorrido nos acordamos del resto del Equipo que por distintos motivos no pudieron acompañarnos esta vez, pero que esperamos que en la próxima estemos todos juntos y con una gran cantidad de nieve pegado en nuestros crampones. Hacer mención a nuestro nuevo compañero Félix que se estreno en la alta montaña como nos tiene acostumbrado, con sobresaliente, quedo gratamente maravillado con esta Sierra y que esperemos que en próximas quedadas nos acompañe, eso si, nosotros no paramos para beber… deja la mochila de los libros y recógete una con “camel” ja ja ja !!! Enhorabuena maquina !!!

CRONICA LE GRAND RAID DES PYRENEES

¿Que he hecho mal ?, que me llevo a estar en el arco de salida de Ville Aure con el pensamiento puesto en no terminarla, nunca me había pasado esto antes, en la carrera si, piensas de todo, pero…¿En la salida?, nunca, No quiero evadir o encubrir los motivos y echarle la culpa a otros factores, no supere la prueba, por no haber efectuado un entrenamiento de calidad y punto. Tengo que mejorar la técnica de bajada y eso que creo que he mejorado bastante respecto a como empecé, con mas miedo que siete viejas, caso contrario me ha pasado en la marcha, en la cual la he descuidado en los entrenamientos y ahora camino a paso tortuga.
En resumidas cuentas y sobre todo para tener la escusa de poner las fotos, aquí os cuento en resumidas frases como fue mi peregrinar por Le Grand Raid des Pyrenees 2010 una carrera muy dura, tecnica y de ascensos y descensos infinitos.
03:30 horas; suena el despertador del móvil, ducha, desayuno (arroz con leche, potito de multifrutas, si potito, que pasa!!!, galletas con chocolate, zumo de naranja y plátano.
04:15 horas salgo de Saint Lary dirección a Ville Aure acompañado por un corredor francés, el cual entre medio francés, ingles y español, me comenta que hace dos años fue finisher, que va a ser buen tiempo y que yo era la primera vez que me metía en un fregao tan grande, a llegar a la salida nos despedimos y nos deseamos suerte.

05.00 horas; salida y todos corriendo, llegan las primeras rampas por una cómoda pista y empiezo a caminar, pero sin ganas, muy cansado y pensando lo que me queda, ¿Qué cojones me pasa? Lo achaco al palizon de coche que me he pegado desde Algeciras y a las pocas horas de sueño dedicados los últimos días y horas previas, no tengo ganas de estar aquí, increíble!!, pero si es lo que mas te gusta.

06:33 horas: amanece y me veo rodeado de valles, montañas y lagos, esto es una maravilla, es hora de espabilarse y dar lo que se pueda, tengo que disfrutar de todo este magnifico paraje y si llego a meta será un segundo premio y con este lema, me despreocupo y renazco, ahora corro a tumba abierta al primer punto de avituallamiento, es durante este punto donde veo subiendo al primer collado gente echando la papilla y dos ostiazos de corredores franceses, uno se chafo la frente y la nariz quedándose por unos segundos en el terreno totalmente aturdido, suerte que estaba a escasos cien metros del punto de avituallamiento donde fue atendido y el segundo caida de frente quedándose por unos instantes sin respiración, esto va a ser muy duro.

10:16, llegada a Antigues, dos horas y cuarto antes del cierre, no son las cuatro de margen que tenia pensado, llamada a Lorena mientras ingiero un poco de todo que te ofrece el puesto de avituallamiento, que para mi gusto es aceptable, relleno el camel de agua y el bidón de bebida energética, me miro la rodilla y la palma de la mano, va poca cosa, próxima compra unos guantes(en una de las ultimas bajadas adelantando a un compañero, tropiezo y termino deslizándome panza arriba como una cucaracha , ja ja ja)

10:43 horas; me adelanta el corredor francés con el que salí del apartamento y me señala al frente y se ríe de forma maliciosa, levanto la cabeza preguntándome que me quiere decir, cuando… ostias!!! El Bigorre, allí estaba todo vacilon al fondo del valle, madre mía que mole, en la foto no se aprecia ni una cuarta parte de lo como se veía en directo, 11 kilómetros y 1.700 metros me separaba todavía de su cima.

13:50 horas; cima del Pic du Midi Bigorre, me encuentro en el momento más fuerte y cómodo de la carrera desde que llegue al collado de Sencours, 2.378 metros el resto de la subida al Bigorre es una cómoda pista tanto de subida como de bajada ya que se hace por el mismo carril. Desde aquí voy disfrutando como un loco, las montañas están de dulce, con esas nubes que se meten entre los valles dejando solo a la vista sus cumbres y tu en lo más alto sintiéndote un privilegiado de poder ver todo ese escenario.

17:39 horas; tras haber subido dos collados de 2.300 metros, otra caída corriendo sin mayores consecuencias que la vergüenza de caerte, coincido con los compañeros del foro Chusta, nano75, Yerbajo G y ludevu, gente estupenda que entre preguntarnos como íbamos y cosas del mundillo este, sorteamos el ultimo collado para llegar posteriormente a Hautacam.

19:45 horas: llegada al control de Hautacam km 62, dos horas y quince minutos antes del cierre, repongo zampándome todo lo que me ofertan, jamón cocido y queso con pan de molde, gajos de naranja, coca cola, plátano y trozos de chocolate. y aunque salgo a la par de los compañeros pierdo el buen compás que me traían, quedándome atrás y esperando cogerlos más adelante.

23.15 llegada a Villelongue kilómetro 73.9, allí me encuentro a los compañeros que están finalizando su avituallamiento y recambiando cosas de la bolsa de vida, que teníamos depositado. En todo el recorrido era la primera vez que me sentaba, ingiero un bol de sopa y otro de pasta con queso rayado que me sabe a gloria, quiero repetir pero se ha agotado y estaban haciendo mas, a si que cojo la bolsa de vida, me cambio de calcetines y quiero cambiarme de boxer, pero la prudencia me hace desistir ,cogiendo solo una camiseta nueva, busco también la crema muscular milagrosa (el tío de los músculos de Gibraltar) pero no la encuentro (estaba en la otra bolsa en Luz) y es que no se si fue motivada por la caída o por el esfuerzo, tenia un fuerte dolor que se fue prolongando desde la falange del dedo “gordo“ hasta el empeine, pero bueno el dedo lo podía mover por lo que no estaba roto ja ja ja !!!
Durante la aproximación a Villelongue utilice en varias veces la chaqueta nueva de la marca Haglöfs, dando un resultado muy positivo, por lo que opte desechar la otra chaqueta de North Face mas tocha. Siguen sin reponer la pasta, por lo que relleno el bidón que tengo para la bebida energética, de Coca Cola hasta el borde, la noche será dura, en toda estas operaciones tardo quince minutos, por lo que solo tengo de margen de una hora hasta el próximo control.

03:00 horas kilómetro 84 Turon de Bene hora y media antes del cierre, bien sobre el papel pero nada bien físicamente y de coco ni hablamos, desde que salí de Villelongue tuve una subida de mil metros en plena soledad, solo acompañado por la luna llena que iluminaba todas esas impresionantes crestas y collados de estas magnificas montañas, pero me inundo la apatía de seguir en la prueba, con un cansancio general no muy normal en mi en las montañas, no tenia sueño, era cansancio, una cosa muy rara, aburrido...?, esto es la leche!!! todo un año preparando esta prueba… me cago en diez!!! En este punto de avituallamiento había habilitado dos tiendas en las cuales tenían camillas de campaña, en casi todas ellas se encontraba algún compañero tumbado con mantas encima, estaban agotados, lo habían dado todo y allí sus cuerpos dijeron no más, yo sabia que después de salir de allí tenia mi sentencia sellada, pero no quise rendirme y quería que fuese el reloj quien me dejara fuera de esta prueba.

Amanece en el collado de Contente 2.131 metros de altitud, atrás quedaba un ascenso interminable en plena soledad ,solo las luces de algún frontal a lo lejos te hacia intuir lo que te quedaba y como vas dejando atrás compañeros muy tocados, recuerdo al torcer una peña, la sorprendente imagen de una chica sentada en una roca, profundamente dormida, estaba acompañada por otro corredor que con un asentamiento de cabeza me dijo que estaba todo bien. En ese collado pude contemplar la magnitud de esta prueba, montañas delante, detrás, izquierda y derecha todo eran montañas,¿Como he llegado yo hasta aquí?, de nuevo todo el valle que tenia a mis pies tapado por un manto de nubes, por un momento renace en mi el correr cuesta abajo, pero solo es un espejismo, la ascensión al collado había perdido mucho tiempo y aun que llegase con algo de tiempo a Cauterets lo que me quedaba después era insalvable, por lo que me deje caer valle abajo disfrutando de mis montañas en un amanecer de contradicciones, por un lado cansado, cabreado y desanimado por no haber superado la prueba y por otro haber conocido un buen puñado de montañas y rincones que jamás olvidare.

09:15 horas Cauterets kilómetro 98, cuarenta y cinco minutos pasados de control, dorsal ya en mano se lo hago entrega a uno de los controladores que habla perfectamente castellano y le doy las gracias por todo, allí desayuno de lo poco que queda en una pequeña mesa y me indican que en quince minutos partiría el autobús que nos repatriaría a Ville Aure.

11:30 horas Luz Saint-Sauveur esperando el segundo autobús coincido con Unai, un compañero vasco, que había renunciado a continuar y que estaba pendiente a como seguían sus otros paisanos en carrera, allí mientras esperábamos el bus, nos contamos nuestras batallitas y como esta prueba comparada con otras era muy técnica y con interminables cuestas que te hacían mella en la cabeza y como el, junto a sus amigos, semanas antes de la prueba hicieron todo el recorrido en tres días y que si me pareció una maravilla todo lo que vi, lo que quedaba era aun mas bonito, que rabia, ya nos tomaremos la revancha, le decía yo mientras aparecía en el control Chusta y nano 75,que buen tiempo!!, les felicitamos mientras se disponían avituallarse y les deseamos suerte y fuerza para llegar a meta.

Llego el autobús y el sueño, despertándome al poco de llegar a nuestro destino, allí me vi frente a la meta, no niego ni escondo la tristeza de no haber rebasado ese arco como en otras muchas carreras la he cruzado y aunque siempre me digo que no soy conquistador de montañas, si no un simple montañero que busca ser conquistado por estas, siento que estas montañas me robaron algo que es mio y quiero volver y que me devuelva lo que allí perdí, no se si en esas mismas montañas o en otras, el año que viene o el mes próximo, lo único que pienso y tengo claro es en volver cuanto antes en calzarme unas zapas y tirar a la montaña a correr, correr y correr.

¿Lo encontrare ?

...si, al dia siguiente fui a buscarlo y lo encontre.

Un abrazo para todos.